El afeitado en cualquiera de sus formas es una actividad que produce irritación con frecuencia. Las pieles acnéicas necesitan un cuidado especial para no incrementar la morbilidad del proceso. Lo más adecuado es aplicar al pelo de la barba el día antes un gel preparador del afeitado o una crema hidratante no grasa y, al día siguiente, proceder al afeitado. En el caso del rasurado con cuchilla, antes debe ablandarse la barba con agua templada y jabón o espuma de composición ligera. A continuación, se debe aplicar una crema hidratante no grasa, preferiblemente con un excipiente siliconado, y sólo pasadas al menos seis horas, se puede proceder a aplicar el tratamiento tópico específico recomendado. En el caso de utilizar un afeitado eléctrico, éste debe realizarse con las mismas medidas previas y post-rasurado. En definitiva, si el afeitado es con cuchilla debe hacerse después de la ducha o incluso durante ella, mientras que con máquina eléctrica debe hacerse antes. Siempre debemos afeitar en la dirección del pelo.
